Esta función bloquea las herramientas y técnicas de explotación que los hackers utilizan para colarse en sus redes. También detiene la propagación de malware que escanea subliminalmente la red en busca de datos y contraseñas. Esto detiene la piratería y los ataques de día cero en su red. La tecnología anti-exploit comprueba todos los parches abiertos conocidos y asegura la vulnerabilidad para que ningún atacante pueda acceder a su sistema.